Nicki Minaj provocó sorpresa al dirigirse a la Asamblea General de la ONU para denunciar la violencia contra cristianos en Nigeria, afirmando que «no puede seguir siendo ignorada».
Con su voz mediática, la artista exigió acciones urgentes para proteger a las comunidades víctimas y llamó a la atención internacional sobre este grave problema.
En su discurso, Minaj también agradeció al expresidente Donald Trump por haber puesto este tema en su agenda, reconociendo que fue uno de los pocos líderes mundiales que lo priorizó.
Su intervención ha desencadenado un intenso debate y movilizado a miles de seguidores, aumentando la visibilidad del conflicto en Nigeria.





